Doom

A ver si os suena este argumento: Un comando (el mejor, of course) de marines tiene que adentrarse en una estación científica para... ¿Sí? Pues esta película no varía ni un ápice este rollo usado mil veces para intentar dar forma al típico largo de acción. Personajes tan manidos que da hasta risa (el sargento duro, el novato, el colgado, el cristiano, los dos negros hermanados, el chino sobrante y el traumas protagonista...).

Y es que cualquier incursión de un videojuego en el 7º Arte se queda en cualquier cosa menos arte. Y no hace falta que Uwe Boll dirija para que el bodrio sea menos absurdo.

Eso sí, hay que romper una lanza en favor de la película en cuestión ya que el argumento del juego original era tan absurdo como divertido ("tú y tus compañeros os adentráis en una base militar en Phobos [una de las lunas de Marte, junto a Deimos] donde el infierno se ha desatado") pero coño, que era un juego, donde no necesitabas muchas razones para apretar el gatillo.

Hay que admitir que la parte (escueta, eso sí) en la que se homenajea al juego con unos minutos en los que vemos en primera persona los acontecimientos es buena. Y que incluyan la motosierra y el BFG-9000 (Big Fucking Gun, y para los que hayan jugado al original, entenderán porqué se llama así) no deja de ser un acierto. También la inclusión de Carmack (el apellido del co-fundador de Id Software, la empresa responsable de Doom, Quake, Wolfenstein, Duke Nukem...) es un buen punto.

Por lo demás, una película mala, sin grandes alardes de efectos, ni argumentales, ni interpretativos. Puro tirón comercial para los fans del juego. Y desgraciadamente es a los que más defraudará.